Al medir el tiempo que le toma a un rayo láser ir de la Tierra a la Luna y de regreso, rebotando en los reflectores colocados en la Luna durante las misiones de Apolo, los científicos han descubierto que la Luna se aleja lentamente de la Tierra a una velocidad de unos 3.8 centímetros al año. Al mismo tiempo, la velocidad de rotación de la Tierra está disminuyendo lentamente con el transcurso del tiempo. Los científicos saben cuánto disminuye la velocidad de rotación de la Tierra gracias a estudios sobre observaciones de eclipses históricos, fósiles y depósitos de sedimentos.
La energía total del sistema Tierra-Luna se conserva, lo que significa que será constante con el transcurso del tiempo. A medida que la Tierra pierde energía y desacelera, la Luna gana energía, lo que aumenta su periodo orbital y distancia de la Tierra. Los científicos pueden calcular la energía total del sistema Tierra-Luna utilizando los valores de las masas de la Tierra y la Luna, la velocidad a la que rotan sobre sus respectivos ejes, y la distancia entre ellas. Como conocen el ritmo al que está disminuyendo la velocidad de rotación de la Tierra y al que la Luna se aleja, los científicos pueden calcular cuáles eran estos valores hace mucho tiempo.
Por ejemplo, el diagrama muestra que hace unos 900 millones de años, la Luna estaba a una distancia de unos 54 radios terrestres, comparado con ~60 radios terrestres en el presente. Con la Luna a esta distancia, un día en la Tierra tenía una duración de unas 19 horas; había entre 23 y 24 días en un mes y aproximadamente 464 días en un año.
Explica si la información acerca de los cambios en la rotación de la Tierra y la distancia de la Luna a la Tierra, con el transcurso del tiempo, apoyan la hipótesis del gran impacto. ¿De qué manera el ángulo de colisión, como se muestra en el simulacro de la página 2, habría afectado la rotación de la Tierra?